El Iberostar Canarias asalta la fortaleza de Bintaufa
sábado, 26 noviembre, 2011 - 08:11
El Iberostar Canarias dio este sábado un paso al frente para asaltar la fortaleza de Bintaufa, hasta ahora invicta, y sumar un triunfo de prestigio ante el potente Menorca Básquet (62-72). El grupo de Alejandro Martínez sacó adelante un examen de lo más exigente en un partido trabado, que nació, creció y prácticamente murió entre trincheras, hasta que un latigazo canarista, con tres triples claves consecutivos en la recta final, decantó la balanza del lado visitante.
Los aurinegros, que hasta ahora se habían acostumbrado a ganar por encima de los 80 puntos, en ocasiones incluso rozando o superando la centena, demostraron que también saben desenvolverse con autoridad en tanteos cortos cuando el guión así lo requiere. Y así lo demandaron las circunstancias en esta ocasión. Por lo complicado del desafío (el Menorca venía de ganarle a tres favoritos Granada, Burgos y Melilla- en las tres últimas jornadas); y por el desarrollo del choque, muy duro atrás y, por momentos, plagado de demasiados fallos en el tiro por parte de ambos conjuntos.
Un brillante tercer cuarto de Nico Richotti puso al Iberostar Canarias en franquicia y el citado arreón camino del epílogo acabó de tumbar a un rival, que hasta ahora había ganado los cinco partidos que había jugado este curso en su cancha. No le tembló pues el pulso al conjunto de Chema Berrocal, ni siquiera cuando tras más de dos minutos y medio de intercambio de errores, el cuadro canarista estrenaba el electrónico con un 0-5 de inicio.
Curiosamente, como si de un disco rayado se tratara, el encuentro repitió esa misma pauta, la sequía de puntos, al inicio de casi todos los cuartos para luego ir espabilándose al son del ataque canarista, frágil en los albores de cada periodo pero firme y contundente cuando el partido lo requería para evitar, primero que el Menorca se marchara en el marcador; y luego, para sentenciar el partido a su favor.
Con un 10/10 en libres al descanso y sin que los aurinegros pudieran visitar la línea del 4,60 en todo el primer acto, el Menorca aprovechó que el Canarias andaba espeso en el segundo cuarto (sólo una canasta de Fotis en los primeros ocho minutos) para exprimir a cuenta gotas el electrónico y firmar un parcial de 10-2, fraguado básicamente desde los tiros libres (24-19, 29-23 y 31-25). Sin embargo, la aparición de Guillén, un par de canastas de Sàbat y Jakim y un triple oportunísimo del propio Richi permitieron a los tinerfeños salvar los muebles al receso (31-28, 20).
Fue tras el intermedio cuando ambos equipos comenzaron a soltarse más en ataque. El duelo de escoltas entre David Navarro y Nico Richotti relanzó el partido, pero se fue decantando progresivamente del lado del argentino, quien con doce puntos en el tercer cuarto metía de lleno a los aurinegros en la pomada tras un parcial de 0-8 (39-44, 36). Reaccionó Menorca tras un tiempo muerto (5-0 y 44-44, 38), pero una falta y una posterior técnica a Marc Blanch por protestar le dieron al Iberostar Canarias una dósis extra de oxígeno, gracias a cuatro libres consecutivos de Rost y una canasta posterior de Nico (49-57, 30).
Ya en el último cuarto, la historia se repitió. La pausa volvió a sentarle mal al equipo de Martínez, que sobrevivió como pudo durante siete minutos con una única canasta de Jakim Donaldson. Pese a todo, el conjunto tinerfeño disimuló sus errores en ataque fajándose bien atrás y manejando el partido con cabeza. El Menorca llegó a ponerse a cuatro puntos (57-61, a 2:49 del final), pero fue entonces cuando el Iberostar Canarias sentenció el partido con puño de hierro.
Sàbat mandó el primer aviso desde el 6,75 (57-64); Levi Rost le siguió el juego con otro triple sobre la bocina del final de posesión (57-67) y Guillén, a la vuelta del pertinente tiempo muerto de Berrocal, puso ya la puntilla con otro triple con valor oro (57-70) a falta de 1:25. En poco más de un minuto, el Canarias resolvió de un bofetón ofensivo un partido trabado para sumar su novena victoria (62-72) y, lo más importante: responder con contundencia a los triunfos de la mayoría de favoritos (Lleida, Burgos, Melilla ), que habían ganado el viernes noche y acechaban un tropiezo aurinegro en la difícil pista de Bintaufa.
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