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El Iberostar Socas Canarias firma un nuevo festival colectivo para sumar su tercera victoria consecutiva

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Este equipo promete. El Iberostar Socas Canarias sumó este viernes noche su tercera victoria consecutiva en un auténtico festival ofensivo (107-79), que hizo las delicias del respetable. Espoleado por un Santiago Martín de gala, el grupo de Alejandro Martínez repitió un trabajado y meritorio ejercicio colectivo, como ya hiciera en las últimas jornadas, para desarbolar a un Logitravel Mallorca que aguantó hasta mediado el segundo cuarto y cayó luego víctima del arsenal de recursos de un equipo, el aurinegro, que sigue creciendo con el paso de las jornadas.

Los tinerfeños firmaron un minucioso acto de madurez, más que nada porque aguantaron el tirón inicial de su adversario y acabaron imponiendo con contundencia las virtudes de su bloque, hasta el punto de que seis de sus jugadores alcanzaron los dobles dígitos en anotación y cinco lo hicieron en valoración. Y eso que los baleares salieron muy respondones de entrada, fieles al estilo que les había llevado al triunfo ante Burgos y Menorca en las dos últimas semanas.

Los aurinegros aguantaron el tirón inicial de los de Xavi Sastre, que impusieron un ritmo de vértigo para incluso salir por delante en el electrónico (3-7) explotando el letal primer paso de un gran Carlés Bivia, cuyas penetraciones hicieron daño en la defensa anfitriona. El partido nació entre sobresaltos, pero lejos de venirse abajo, el Iberostar Socas Canarias cogió el guante, asumió el duelo y se fue con todo a por la victoria.

Ahí, precisamente, en el intercambio valiente de golpes, pudo más la contundencia de los locales. Biviá y Alonso anotaban con facilidad para los visitantes, pero con Green y Amador bien sujetos, el grupo de Martínez acabaría imponiendo su repertorio de recursos en el segundo asalto. Si de inicio fueron Nico Richotti y Guillén los que sostenían a su equipo en ataque, no tardaron mucho en sumarse a la fiesta nuevos efectivos aurinegros. Y por ahí se rompió el partido.

Un par de triples de Sàbat y varios balones interiores al propio Guillén y a Donaldson comenzaron a desquebrajar el encuentro mediado el segundo cuarto con las primeras diferencias significativas (34-27). Fue el primer aviso de un equipo, el canarista, que acabaría desmelenándose camino del receso (54-37, 20’) para romper ya de manera definitiva el encuentro. Ni la tercera falta de Donaldson menguó el potencial de los locales. Rost, Heras, Chagoyen y compañía continuaron amasando sin contemplaciones el triunfo aurinegro ante el deleite de la grada.

Y es que la segunda mitad no hizo más que confirmar las buenas prestaciones de los tinerfeños, que acabaron incluso repartiendo minutos con inteligencia (ninguno de sus hombres pasó de los 25 minutos en cancha) para dosificar esfuerzos en el inicio de una semana maratoniana, en la que habrá que afrontar hasta tres partidos de máxima exigencia en sólo nueve días. Superada con éxito la primera etapa, la próxima parada llevará al equipo de Martínez a Logroño, este miércoles, para medirse a un  complicado Knet & Éniac.

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