El Iberostar Socas Canarias enseña los dientes y se lleva el duelo de líderes
sábado, 19 noviembre, 2011 - 03:11
El Iberostar Socas Canarias dio este viernes noche un puñetazo sobre la mesa al imponerse al Ford Burgos (90-69) en el duelo de líderes disputado en el Santiago Martín. El grupo de Martínez volvió a firmar una salida casi de libro y encarriló el encuentro en uno de esos bofetones ofensivos con los que tan bien ha acostumbrado a su parroquia en lo que va de curso.
Ni el hecho de ser uno de los mejores defensores de la liga, ni su estadística de invicto a domicilio, le sirvieron al equipo azulón para frenar los arreones ofensivos de un equipo, el canarista, casi imparable cuando coge velocidad de crucero. El equipo tinerfeño desnudó al Burgos de entrada y luego manejó con cabeza los avatares del partido.
El Ford Burgos, eso sí, tuvo el orgullo de apretar la contienda tras el receso y por momentos merodeó la barrera sicológica de los diez puntos para intentar volver a la vida. Un intento en cualquier caso baldío ante la mayor intensidad y acierto de un equipo, el canarista, que terminó alargando su ventaja hasta los 21 puntos.
Un triple de Rost, un 2+1 de Guillén, una penetración y dos triples de Richotti, unido a un buen trabajo defensivo comenzaron a resquebrajar la contienda a favor de los insulares en una puesta en escena casi inmaculada. Con las pérdidas bien sujetas, lejos de menguar en su esfuerzo, el equipo tinerfeño fue apretando progresivamente el acelerador (11-6, 23-11, 36-18) ante un rival, que apenas encontraba respuestas en su rico arsenal de recursos y se iba desquiciando con el paso de los minutos.
Incluso, con la supuesta segunda unidad en pista, el Iberostar Socas Canarias mantenía el listón por las nubes, llegando a doblar a los burgaleses camino del intermedio (44-22). Con Phillip en tres faltas y Adrián Fuentes desgastando la salida del balón de los burgaleses, un par de triples de Nacho Yáñez consecutivos junto a varias acciones de coraje de Fotis y Chago llevaron el delirio a la grada del Santiago Martín, mientras el Burgos caía preso de la impotencia.
En esta dinámica, el técnico azulón, Andreu Casadevall, veía el camino de los vestuarios tras ser castigado con dos técnicas por protestar. Por momentos el Ford Burgos se vía totalmente fuera del partido. Sin embargo, un 0-5 justo antes del descanso (48-33, 20) y una acertada reanudación permitieron a los visitantes soñar con volver a meterse en la pomada.
Los triples de Schraeder (5/7) y la dirección de Dani López comenzaban a hacer mella en la defensa local (60-51, 67-57), pero el amago de remontada se quedó en eso: en un intento. Un triple al límite de la posesión de Jaime Heras, ya al borde del último cuarto, devolvió a los aurinegros a su redil de confianza y les sacó de la pequeña empanada que por momentos trató de aprovechar su rival.
La batuta de Albert (10 asistencias al cierre del partido), los libres de Guillén, los tiros de media distancia de Jakim Donaldson y un par de mates del pívot de Pittsburg, tras sendas asistencias de lujo del propio Sábat y de Heras, allanaron, ya de manera definitiva, la victoria de los tinerfeños que además estiraron su renta hasta los 21 puntos ante la euforia de los suyos, pensando ya en el average de cara a posibles empates en el futuro.
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