El Iberostar Tenerife cae maniatado ante un CAI Zaragoza más hecho a la categoría
sábado, 6 octubre, 2012 - 07:10
El Canarias no pudo estrenar su casillero de victorias en su reencuentro como local con la ACB al caer maniatado ante un CAI Zaragoza (65-85) muy bien armado y muy seguro del terreno en el que se mueve. La inspiración de un Van Rossom casi impecable (5/6 en triples y 3/3 en tiros de dos para 28 de valoración) y la concentración intermitente de los anfitriones, que no tuvieron la continuidad necesaria cuando amagaban con engancharse de lleno al partido, impedieron a los tinerfeños darle una alegría a su afición en la vuelta de la ACB a Tenerife.
No pudo el Canarias con un rival que venía con la lección muy bien aprendida, consciente de las teclas que tenía que tocar para menguar la filosofía ofensiva de un equipo, el aurinegro, que no pudo practicar el juego que le ha caracterizado en los últimos tiempos. Hubo fogonazos de acierto en los que el grupo de Alejandro Martínez opositó a pelear con argumentos camino del segundo cuarto (18-17) e incluso, tras el descanso (50-53). El caso es que no hubo manera de prolongar esas situaciones y el Canarias se topó ante un rival más hecho a la categoría, todavía demasiado nueva para los insulares.
Así lo demostró el perímetro rojillo que martilleó las posibilidades locales una y otra vez, sobre todo, gracias a un Van Rossom que se convirtió en una auténtica pesadilla desde más allá del 6,75. Para colmo de males, el equipo tinerfeño perdió a Jakim Donaldson mediado el tercer cuarto por una fuerte contractura muscular en el cuádriceps de su pierna derecha, que le obligó incluso a meterse en la enfermería cuando el de Pittsburgh (8+9 hasta ese momento) podía haber sido un arma a utilizar para entrar con opciones en la recta final.
No bastaron las maneras de Blago Sekulic (13 puntos y 7 rebotes), que va ganando protagonismo; ni el buen hacer de Lampropoulos, el oficio de Guillén, los arranques de talento de Saúl Blanco o la raza del grupo, que intentó varias veces meterse en el choque para luego caer presa de la impotencia ante un rival que se adjudicó la victoria de manera merecida. No es casualidad el buen arranque liguero de un CAI Zaragoza cuyo trabajo viene de atrás y está llamado a aumentar más si cabe su cuota de incidencia en la Liga Endesa.
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-- Foto de portada (Sergio Díaz): Jakim Donaldson trata de anotar ante la defensa de Pablo Aguilar.