Desafío de máxima exigencia ante el ‘nuevo’ Granca
viernes, 15 enero, 2021 - 03:01Un derbi diferente. El Iberostar Tenerife visita este sábado al Herbalife Gran Canaria en una versión distinta del duelo de máxima rivalidad regional (Gran Canaria Arena, 19:45 h.i., Movistar Plus Deportes | Dial 53). Distinta, porque desgraciadamente tendrá que jugarse sin público, por la conocida pandemia. Y distinta, porque aguarda a los aurinegros un Granca que poco o nada tiene que ver con el que cayó en la primera vuelta en el Santiago Martín (99-80).
El conjunto amarillo ha acometido varias incorporaciones de relumbrón para enderezar el rumbo en la ACB. Los grancanarios son ahora duodécimos en la tabla (7/11), tras haber ganado cinco de sus últimos seis compromisos en el torneo doméstico. Por otra parte, iniciaron el Top 16 de la Eurocup con derrota este miércoles, ante el Mornar Bar (100-102), tras haber sido líderes de su grupo en la fase previa (8/2).
No estarán, por distintas circunstancias, con respecto al duelo de Tenerife, Matt Costello, Jacob Wiley, Frankie Ferrari ni Fabio Santana; pero por el contrario Porfi Fisac contará con AJ Slaughter, Oliver Stevic, Earl Clarck y Sean Kilpatrick (433 partidos entre estos dos últimos en la NBA), fichajes todos ellos llamados a ser determinantes. A eso hay que añadir el regreso de Javier Beirán, entonces apartado; y del polaco Olek Balcerowski, que no jugó en noviembre, y que ahora es parte importante en la rotación interior.
El oficio en la dirección del tándem Albicy-Slaughter, con capacidad incluso para anotar con fluidez (el segundo viene de hacer 23 puntos en Eurocup, con 5/6 en triples, y 10 asistencias); un perímetro muy físico (Okoye), con puntos (Dimsa, Kilpatrick…) y calidad (Beirán, Clarck..); la versatilidad de Shurna o Burjanadze; la inteligencia de Stevic para leer las situaciones de bloqueo y continuación; y el hambre de élite de Balcerowksi y Diop, cada vez con más confianza e incidencia en el juego de los suyos, serán algunos de los argumentos a contrarrestar.
Tendrá pues el Iberostar Tenerife que emplearse a fondo para igualar el nivel de intensidad de los anfitriones, especialmente en la batalla del rebote; recuperar la fortaleza colectiva atrás que no tuvo en las dos últimas jornadas ligueras, y jugar con el mayor criterio y acierto en ataque para imponer su ritmo y hacer valer sus señas de identidad. Desafío exigente y plagado de atractivos el que espera a los laguneros en una nueva y diferente edición de la fiesta del basket canario.