
El más difícil todavía
sábado, 12 abril, 2025 - 01:04La Laguna Tenerife mide este domingo el techo de su irreverencia en un desafío repleto de alicientes ante el Real Madrid (Santiago Martín, 12:00 hora insular | #Vamos – M+ Deportes | Diales 8 y 63). Segundo contra primero pondrán a prueba su buen momento de forma, en un pulso entre las dos mejores rachas vigentes de la Liga Endesa.
El equipo aurinegro, que acumula diez triunfos consecutivos en el torneo doméstico, recibe a un rival, que ha enhebrado 14 victorias seguidas en ACB y que defiende su liderato (22/4), con un solo triunfo por encima de los tinerfeños (21/5), que aspiran pues a darle una vuelta de tuerca más a una temporada histórica.
Los insulares podrían certificar este fin de semana su clasificación para las series por el título, incluso con una derrota, en función de los resultados del resto de implicados. El cruce de la primera vuelta se saldó con un 96-86 a favor de los de Chus Mateo, que están obligados a ganar en la Isla o perder por menos de once para conservar su primer puesto.
Con las entradas disponibles agotadas desde hace semanas, en el que será el 25º sold out consecutivo del proyecto canarista, La Laguna Tenerife intentará hacer valer el factor cancha en un encuentro plagado de atractivos que coge además a ambos equipos metidos de lleno en sendas batallas de mucho nivel a título continental.
Los aurinegros afrontarán el miércoles en Tortona el segundo capítulo de su serie de cuartos de final de la Basketball Champions League (BCL), ante el Derthona Basket italiano, con 1-0 de momento a su favor; mientras que el conjunto blanco jugará este martes ante el París Basketball un play in a partido único para buscar su billete para los playoff de la Euroliga (en caso de perder, tendría una repesca el viernes, también en casa).
Aguarda un desafío de máxima exigencia para los insulares este domingo, una vez que el cuadro merengue ha ido a más en las últimas fechas a medida que ha ido recuperando efectivos.
La escuadra lagunera afronta el reto con la consabida ausencia de Fran Guerra, operado el jueves con éxito de su lesión; y también sin Joan Sastre, con molestias en la cadera; mientras que los madridistas tenían a Ndiaye con molestias en un hombro, que le impidieron estar disponible para su choque del jueves pasado, en Belgrado.
El suyo es un plantel diseñado para pelear una temporada más por todos los títulos en litigio. Números en mano, el Real Madrid es el segundo equipo más valorado de la Liga Endesa (105,19 créditos por partido); el segundo que más rebotea (38,4 capturas de media) y el que más tapona.
Será pues un pulso muy físico, que exigirá de la versión más sólida de los tinerfeños, esa que se crece desde su fortaleza atrás para luego atacar con criterio y acierto, premisa fundamental en este tipo de encuentros. Minimizar el número de pérdidas para evitar que el adversario le castigue a campo abierto y tratar de llevar el choque a su trinchera, junto al apoyo incondicional del público, especialmente en los momentos más delicados, serán también aspectos a tener muy en cuenta.
Enfrente habrá que reducir las prestaciones de un roster con jugadores determinantes en todas las posiciones y que ha ido sumando argumentos para la causa, coincidiendo con un paso al frente de jugadores como Andre Feliz o Sergi Ibaka, entre otros.
La calidad en la dirección de Facundo Campazzo; la facilidad para ver aro de los Mario Hezonja, Dzanan Musa y compañía, en el perímetro; el liderazgo de Sergi Llull; el hambre de élite de Hugo González; los intangibles de Alberto Abalde y un juego interior con múltiples registros, liderado por Walter Tavares, pero con una rotación profunda y variada (Garuba, Ibaka, Fernando…), serán solo un botón de muestra de los factores a contrarrestar.