El Iberostar Tenerife suma otro triunfo de mérito y afina sensaciones para la F4
sábado, 27 abril, 2019 - 11:04
¡No se rinde! El Iberostar Tenerife sumó este sábado su segunda victoria consecutiva ante un rival directo en la puja por entrar en los playoff de la Liga Endesa, al imponerse al Morabanc Andorra (87-83) en un partido que sirvió además para aglutinar buenas sensaciones y afinar la maquinaria de cara a la Final Four de la #BasketballCL.
El grupo de Txus Vidorreta forjó en parte el triunfo en un primer acto casi impecable (54-39), atinadísimo desde la larga distancia (10/15) y meritorio atrás. Tocó sufrir luego, entre otras cosas porque pesaron las piernas tres días después de otro reto de máxima exigencia, el celebrado el miércoles ante el Joventut; y también porque el Andorra tiró de espíritu y jugó bien sus bazas para intentar apretar el epílogo.
Pese a todo, el equipo aurinegro, espoleado por su afición, mantuvo el tipo y sumó su 15ª alegría liguera del curso con un notable esfuerzo colectivo (los once que jugaron ya habían anotado al descanso), que permitió además rescatar las mejores sensaciones de Lucca Staiger, letal en la transición del primer al segundo cuarto para romper el encuentro; de Davin White, que colaboró igualmente con dos triples en pleno vendaval aurinegro; o de Nico Richotti, cada vez con más ritmo.
Iberostar Tenerife -- MoraBanc Andorra (87-83) RESUMEN // Jornada 29 Liga Endesa from ACB on Vimeo.
Costó llevar el partido a la trinchera canarista en los primeros compases, ya que Andrew Albicy, primero, con diez puntos casi consecutivos (11-13); y David Jelinek, después, amagaron con que el guión creciera del lado andorrano (21-23, tras triple de Sané). Fue entonces cuando la segunda unidad de los tinerfeños volteó el panorama. El Canarias dio un paso al frente en defensa, apretó las líneas de pase y propició varias pérdidas visitantes (once al descanso), lo que unido a un Staiger en estado de gracia acabó por cimentar un parcial de 13-0 (34-23).
Lejos de quitar el pie del acelerador, el Iberostar Tenerife disfrutó entonces de sus mejores minutos y siguió hurgando en la herida del rival, especialmente desde la larga distancia, hasta irse al descanso quince arriba, con un triple sobre la posesión de White (54-39). Tras la pausa, el Morabanc Andorra mejoró prestaciones y ató en corto la cuota de balones perdidos (solo uno en toda la segunda mitad), lo que fue apretando el tanteo de manera progresiva.
El conjunto insular perdió algo de chispa, si bien el oficio de Javi Beirán, Richotti o Bassas, permitía a los anfitriones llevar aún las riendas del choque (68-53, 75-65). Fue en los últimos cinco minutos cuando el Morabanc circuló mejor el balón (21 asistencias, 14 de ellas de Albicy) y puso en serios aprietos la victoria aurinegra. El caso es que el amago de remontada visitante no pasó de estrechar el cerco hasta los dos puntos (85-83) y ya en pleno carrusel final de tiros libres.
En esa tesitura, el Canarias, que además protagonizó varias defensas de mérito en los momentos delicados, soportó la presión y encarriló la deseada victoria. Un soplo de aire fresco para mantenerse muy vivo en la pelea por acabar lo más arriba posible la Liga Endesa y un buen halo de energía positiva para el gran desafío de la semana que viene: la Final Four de la Basketball Champions League.
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