El sueño de todos
jueves, 5 mayo, 2022 - 10:05
Mañana es el día. El Lenovo Tenerife afrontará este viernes el gran desafío de la temporada. El grupo de Txus Vidorreta se medirá al Hapoel Holon israelí en busca de la tercera final de su historia en la Basketball Champions League (Bilbao Arena, 17:00 hora insular, DAZN | Teledeporte).
Tras el ejercicio de resiliencia que ha supuesto un curso no exento de dificultades (52 partidos oficiales hasta la fecha), después de más 60.000 kilómetros recorridos solo en el ámbito de la competición europea, once países, un prodigioso mes de abril y un buen puñado de retos deportivos superados, el equipo aurinegro buscará con ahínco el premio que ha perseguido con tanta ilusión: el billete para la gran final de la BCL.
Campeón en la primera edición del máximo torneo de clubes de FIBA Europa, allá por 2017; y subcampeón dos años después en Amberes, el conjunto insular quiere pelear otra vez por la corona continental.
Lo hará en territorio amigo, por aquello de que la Final Four se celebra en la ciudad natal de su entrenador; y porque hasta cinco jugadores canaristas jugaron en su día para el Bilbao Basket; y arropado por los más de 300 seguidores aurinegros que han viajado a tierras vascas.
Con la ilusión por bandera y consciente de lo complicado del reto, la escuadra lagunera tendrá que ofrecer su mejor versión para tumbar a un adversario muy físico, que se ha ganado a pulso su condición de primer club israelí en clasificarse para unas semifinales del torneo. Cuartofinalista la campaña pasada, el cuadro amarillo y púrpura se plantó en la BCL, tras levantarle un 1-0 al Besiktas y saldar por la vía rápida su serie ante el SIG Strasbourg (2-0).
La fortaleza defensiva del bloque, el control de las pérdidas y la energía para ir con todo a la batalla del rebote; junto al criterio y acierto que requiere una cita de este nivel, serán factores claves para sacar adelante el desafío. Eso, y el buen manejo de los detalles, en una batalla táctica preparada a conciencia, serán fundamentales para opositar con argumentos al triunfo.
Enfrente, el Lenovo Tenerife tendrá un roster muy compensado, que combina el talento de sus hasta nueve estadounidenses, con jugadores que ejercen de pegamento y cuyos intangibles suman lo suyo en un bloque con mucho carácter competitivo, bien dirigido por una leyenda del basket hebreo, el otrora jugador del Macabbi, Guy Goodes.
Minimizar lo mucho y bueno que generan sus manejadores de balón (Ragland, Smith, McGee) para evitar que lleven el pulso a su territorio; e impedir que los Jhonson, Kyser y compañía hagan su juego se antojan también factores determinantes.
Para ello, el Canarias deberá armarse de paciencia e intentar ser lo más fiel a su estilo, rumiar el partido desde la dureza mental del colectivo y el mejor criterio posible para seguir sacando el máximo provecho a sus ataques (los aurinegros son el equipo que más anotan por posesión de la BCL).
Un cometido pues solo para valientes que el club canarista se acostumbró a afrontar en un último lustro plagado de desafíos. Una oportunidad más para seguir haciendo historia. ¡La guinda a otra temporada memorable!