El Lenovo Tenerife estira su sueño y jugará la final de la #BasketballCL
viernes, 6 mayo, 2022 - 09:05Cabeza, corazón… ¡y mucho baloncesto! El Lenovo Tenerife tumbó este viernes a un incansable Hapoel Holon (71-78) y sacó su billete para la gran final de la Basketball Champions League. En un sobresaliente ejercicio de oficio y liderado por la clase de Marcelinho Huertas, el grupo de Txus Vidorreta alcanzó la tercera final europea de su historia… ¡en solo cinco años!
Un logro memorable, de incalculable valor, solo al alcance de proyectos forjados desde la implicación y el trabajo constante de toda la familia canarista. Hubo que sufrir otra vez lo indecible para añadir un nuevo capítulo a la historia aurinegra, pese a que los tinerfeños llegaron a disfrutar incluso de una renta de doce puntos en varias ocasiones.
La fortaleza atrás del bloque y el carácter para sobreponerse a los múltiples amagos de los israelís por forzar la remontada (llegaron a ponerse uno arriba a poco más de tres minutos del final) explican un nuevo y meritorio triunfo, con una recompensa mayúscula, la de luchar por recuperar la corona continental cinco años después de su primer título.
Salió muy metida la escuadra lagunera, que maniató de entradas las principales virtudes del rival. Funcionó el plan de partido meticulosamente preparado por el staff técnico y funcioná la capacidad de técnico y jugadores para leer un encuentro no exento de dificultades.
Optó por ahí Txus Vidorreta por igualar en altura el quinteto inicial del Holon, con Sastre de inicio, para jugar luego la baza de la eterna dupla Marce-Gio, esa que pasará a la historia como una de las parejas memorables del deporte tinerfeño de todos los tiempos. El control del rebote y el criterio para circular el balón se tradujeron en una excelente puesta en escena (2-11).
Entre el arte del pick and roll y los par de triples consecutivos de Fitipaldo y Doornekamp, el Canarias alargó su bofetada inicial hasta el 8-19. Ni la irrupción de Joe Ragland y Rafa Menco; ni la prematura segunda falta personal de Gio, mermaron a un Lenovo tremendamente serio, que amagó incluso con romper el partido (25-37, min. 17).
Un parcial de 8-0 estrechó el cerco, pero el conjunto insular reaccionó con entereza. El buen hacer atrás, en las acciones de dos contra uno, y el paso al frente de Fran Guerra, permitieron alcanzar el receso nueve arriba (33-42).
Tras el paso por vestuarios, el Holon aumentó más si cabe su intensidad defensiva, y espoleado por su ruidosa afición (unos mil seguidores desplazados desde Tel Aviv) volvió a reducir distancias, aprovechando la buena mano de Menco y Pnini (43-49). El Canarias comenzaba a sentirse incómodo y no acababa de sentenciar.
Las pérdidas y los errores en tiros liberados sembraban cierta incertidumbre, pero el cuadro tinerfeño exprimía su paciencia para mantener la delantera. Incluso cuando más cuesta arriba se ponía el encuentro (57-59), el Lenovo tiraba de carácter competitivo y de la magia de Marce para encontrar a Gio (57-63).
El caso es que el Hapoel no se rendía y un arreón de 7-0 supuso la primera ventaja israelí de todo el partido (69-68). Lejos de caer en pánico, el Canarias se hizo fuerte desde la defensa y aprovechó el oficio de su quinteto y el acierto en los tiros libres para sepultar las ilusiones del rival y sacar el billete directo a la gran final de mañana, que medirá a los canaristas con el BAXI Manresa (19:00 hora insular).
-- Pinchar aquí para ver las estadísticas / Fotos de Emilio Cobos (CBC)