El Iberostar Tenerife no puede con un Unicaja Málaga superior
domingo, 16 noviembre, 2014 - 07:11
El Iberostar Tenerife se vendrá de vacío de tierras andaluzas tras caer ante un superior Unicaja de Málaga (84-68) en un partido donde los locales marcaron territorio desde un principio y manejaron luego con cabeza sus ventajas en el electrónico. El conjunto de Joan Plaza no dejó ningún resquicio a la sorpresa, impuso su mayor potencial de recursos y respondió con contundencia cualquier atisbo de reacción canarista.
El partido se puso cuesta arriba muy pronto para los tinerfeños, que sufrieron de entrada la mayor fortaleza física de un Unicaja que además explotó el inspirado arranque de Ryan Toolson (10 puntos en apenas siete minutos) y Kuzminskas para abrir pronto brecha en el marcador (8-2, 16-8). El Iberostar Tenerife, que contó ya con la reaparición de Sekulic, baja por lesión la semana pasada ante el Barça, intentó contrarrestar el buen inicio de los anfitriones, pero no hubo manera.
Golubovic cogió el relevo ofensivo en los malagueños, impuso su poderío en la pintura y abrió la ruptura a la postre definitiva coincidiendo con un mal arranque de segundo cuarto de los visitantes, que estuvieron más de cuatro minutos sin anotar y encajaron un parcial de 11-0 (35-16, 14'). Con el Unicaja enchufadísimo y demostrando el porqué de su enorme caché, al equipo aurinegro no le quedaba otra que tirar de orgullo para impedir que la desventaja fuera a mayores.
Lo intentó el grupo de Alejandro Martínez, con un 0-7 que estrechó circunstancialmente el cerco (35-23, 18'), pero encontró rápida respuesta de los anfitriones muy acertados desde el 6,75 (12/25), con Green y Kuzminskas en su mejor versión y superiores en la batalla del rebote (43-27, 20'). Ese guión volvió a repetirse tras el receso.
El Canarias, que además perdió a Blanco para la segunda mitad por un tirón en el gemelo derecho, mejoró prestaciones, guiado por Sikma y varios arreones con Beirán, Heras o Nico de estiletes, pero no le valió más que para frenar la estampida local, igualar el tanteo parcial del segundo acto, y caer por los mismos 16 puntos de desventaja que ya acumulaba al descanso.
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