El Iberostar Tenerife agiganta su leyenda con una remontada histórica
jueves, 14 marzo, 2019 - 12:03
¡Noche mágica en el Santiago Martín! El Iberostar Tenerife firmó este miércoles una remontada sin precedentes en la historia de las series finales de la #BasketballCL, al levantar una desventaja de 12 puntos ante el Promitheas Patras y sellar su billete para los cuartos de final con una lección de orgullo y coraje, cimentada en una exhibición defensiva para la videoteca (79-57). El grupo de Txus Vidorreta se medirá en la siguiente ronda al poderoso Hapoel Jerusalem, que se imponía en su eliminatoria al Neptunas Klaipedas lituano.
Un plan magistralmente diseñado y ejecutado a la perfección por los jugadores, de principio a fin y sin fisuras, la fortaleza del colectivo, y el aliento desde la grada de la parroquia aurinegra explican lo vivido en otra noche memorable para el canarismo. Un gesta más meritoria si cabe a tenor de la calidad de un rival, el griego, que se ha ganado a pulso su condición de revelación del basket heleno en las últimas dos temporadas.
La hazaña canarista tuvo su punto de partida en una puesta en escena de lo más intensa. La defensa de ayudas, con un Sebas Saiz muy móvil y Davin White poniendo el listón muy alto entorpeciendo la subida de balón de Rion Brown, desquició de entrada al Promitheas, que no se encontró cómodo en ningún momento. El buen hacer en ataque del propio Saiz y de Tim Abromaitis abrieron ya de inicio las primeras rentas significativas (9-4, tras triple de Nico Brussino) y el cúmulo de virtudes insulares fue desnudando progresivamente a los de Patras.
De hecho, un triple de Lucca Staiger en el minuto nueve situaba ya a los anfitriones en la distancia a superar (22-10) y metía ya del todo el miedo en el cuerpo a los visitantes. Solo algunos errores en el tiro libre impedían a los tinerfeños ampliar aún más su ventaja por momentos, pero lo cierto es que el Canarias seguía a velocidad de crucero, haciendo mucho daño en el rebote ofensivo e imponiendo un ritmo brutal de partido que desarboló al Promitheas (27-14 para cerrar el primer cuarto con un triple de Pierre Gillet).
En esa dinámica, y moviendo el balón con mucho criterio en ataque (nueve asistencias al descanso), el Iberostar Tenerife se iba al descanso con una suculenta renta (44-23) y un enorme derroche físico detrás. Lejos de bajar el pistón, el grupo de Txus Vidorreta se mantuvo firme tras la pausa, pese a tener que sobrevivir a cierta espesura ofensiva, en pleno amago visitante por agarrarse a la eliminatoria endureciendo el partido. Las continuas visitas al tiro libre de los griegos (25 en la segunda mitad) les permitían coquetear con estrechar el cerco, pero el Canarias no se rindió nunca.
Cualquier atisbo de desconexión aurinegra saltó por los aires con un brillante final de cuarto. Un triple de Ferrán Bassas y otro posterior de Nico Richotti desde el centro de la cancha, dinamitaban del todo el Santiago Martín (64-41). Lo intentó entonces el Promitheas encomendándose a la calidad de Rion Brown y firmó un parcial de 2-8 para reducir ligeramente la desventaja (66-49), pero el Iberostar Tenerife reaccionó con oficio y calidad, espoleado por su afición.
La solidez atrás de Rodrigo San Miguel, sus fogonazos en ataque, y la resistencia aurinegra para aguantar el tipo, desactivaron del todo al equipo heleno, que acabó sucumbiendo a la heroicidad de los tinerfeños. Una noche mágica más que añadir a la historia del club canarista. Una remontada memorable que se recordará durante mucho tiempo en el deporte tinerfeño.
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